Secuelas bastardas (VIII)

Ya está aquí de nuevo “Secuelas Bastardas”, la serie de artículos más longeva de la historia de este humilde blog. Y si dura tanto es por el éxito que tiene y porque vosotros pedís más y más entregas y como ya dije una vez, no hay mejor homenaje a un artículo dedicado a las secuelas que darle eso, secuelas.

Nuestro menú de hoy es bastante curioso. Tenemos unas albóndigas caducadas por culpa de unos camioneros que se empeñan en ser lo que no son, caníbales que no comen carne y una niña del exorcista que ni viene ni se la espera. ¿Listos para sumergiros en el mundo de las continuaciones apócrifas? ¡Pues vamos allá!

1) “El espiritista: Exorcista III”

“El espiritista” es una coproducción hispano portuguesa de 1977 protagonizada por Vicente Parra en el papel de un fotógrafo que, además de hacer reportajes, se dedica a hacer sesiones de espiritismo ya que, en una caso alucinante de pluriempleo bizarro, el pavo también es médium. Durante una de esas sesiones, el tío mete una cagada de órdago y le posee un espíritu que, de todas las vejaciones y torturas imaginables a las que le puede someter, le obliga a cuidar de su mujer.

Evidentemente con un argumento así no es de extrañar que “El espiritista” esté considerado en algunos círculos como film de culto. Lo que no tengo tan claro es que en su momento el público respondiera con tanto entusiasmo y fuera un éxito de taquilla. Pero vamos, pondría las dos manos en el fuego a que no lo fue. Supongo que fue debido a eso que cuando el film se editó en vídeo se decidiera añadir el subtítulo de “Exorcista III”. Digo que fue cuando esto sucedió cuando la película llegó a los videoclubs porque en los posters de cine a los que he tenido acceso no indican por ningún lado que esto sea una secuela del film de William Friedkin. Además, da la casualidad que “El espiritista” vio la luz el mismo año que “El exorcista 2: El hereje”, por lo que queda bastante claro que la idea de hacerla pasar como la tercera entrega de “El exorcista” surgió tiempo después.

Póster original de «El espiritista».

Por cierto, el cartel de la película también tiene delito. En él reproducen una escena del film, pero como en esa secuencia sale una tía en pelotas lo que se les ocurrió hacer, supongo que para evitar algún problema de censura, fue dibujarle un vestido a la chica. Por si esto no fuera suficientemente deleznable, añaden también la pata de un indefinido animal con vete a saber tú qué fin.

Los retoques que hicieron para el póster apenas se notan.

Resumiendo: “El espiritista: Exorcista III”, es una falsa secuela, una película infame y tiene un póster que da vergüenza ajena. Es el culmen de la cutrez.

2) “La loca academia de los albóndigas”

Aquí ya rozamos de nuevo el colmo de la desvergüenza a la par que la estupidez supina. Por un lado el distribuidor de turno intenta hacer negocio de la manera más ruin con una película en la que no confía demasiado. Esta película es “Screwballs academy”, y como va de estudiantes que solo piensan en sexo el tío decide hacerla pasar por secuela de una comedia de similar estilo. Como el cupo de secuelas falsas de “Porky’s” ya estaba lleno, tal y cómo expliqué aquí, se decanta por hacerla pasar por una nueva entrega de “Los incorregibles albóndigas”, que total por aquel entonces solo tenía una continuación bastarda, eso sí, muy famosa, tal y cómo conté aquí.

Pero como poner la palabra “albóndigas” en el título con el fin de confundir al público no debió parecerle una táctica segura de alcanzar el éxito al cien por cien decide además poner delante lo de “La loca academia de…” tan en boga en el cine ochentero gracias a la saga “Loca academia de policía”, que también tuvo su correspondiente falsa entrega tal y cómo pudisteis descubrir aquí.

Lo mejor de todo es que “Screwballs academy” podría haberse hecho pasar por la tercera parte de “Los rompecocos”, cuyo título original era «Screwballs», cosa que hizo que en su momento en USA y Canadá se pensara que «Screwballs academy» era secuela de aquella, pero supongo yo que estrenar esta como “La loca academia de los Rompecocos” tampoco hubiese ayudado mucho en su carrera comercial, aunque fuera mucho más lógico titularla así puesta a hacerla pasar por lo que no es.

3) “Holocausto caníbal 2”

¿Cómo es posible que un film de tanto éxito y que levantara tanta polvareda como “Holocausto caníbal” jamás tuviera una secuela? Supongo que los problemas legales que tuvo su director tras su estreno hizo que más de uno se echara atrás porque una segunda parte hubiese vuelto a ser un taquillazo seguro.

A falta de secuela oficial lo que si hubo fueron varias no oficiales. Ojo, que es un lío de tres pares de cojones porque todas y cada una de ellas adoptaron el título de “Holocausto caníbal II”.

La que llegó a los cines y videoclubs de aquí se titulaba originalmente “Schiave bianche: Violenza in Amazzonia” y fue dirigida en 1985 por Mario Gariazzo a.k.a. Roy Garrett. En ella nos hablan de las vicisitudes que pasa una estudiante de viaje por el Amazonas tras ser secuestrada por un grupo de caníbales.

Éste es el «Holocausto caníbal II» que actualmente puedes encontrar en DVD.

Años después se editaría en DVD otra “Holocausto caníbal II”, que en realidad es el film que se estrenó aquí en su momento como “El gran infierno verde”, que recordemos era el título del documental que grababan los protagonistas del “Holocausto caníbal” original y que también fue homenajeado en el film “The green inferno” de Eli Roth. Como “El gran infierno verde” en algunos países se estrenó en 1988 como “Holocausto caníbal II” doy por hecho que es así como se la vendieron a la gente de Creative para su distribución en DVD aquí. O eso, o estos también le echaron morro al asunto. Lo dicho anteriormente: un lío de tres pares de cojones.

«El gran infierno verde» ahora se conoce aquí como «Holocausto caníbal II».

Mirad que en esta sección hemos tocado historias raras, ¿eh? Pero tal vez la historia de los varios “Holocausto caníbal 2” se lleva la palma.

4) “Convoy II”

Y para acabar una historia más ligerita.

En 1978 Sam Peckinpah nos presentaba “Convoy”, un film protagonizado por Kris Kristofferson en el que nos narraba la protesta que organizaban unos camioneros a causa del injusto arresto de un compañero suyo.

El film debió funcionar las mil maravillas en taquillas así que era cuestión de aprovecharse rápido de ese éxito. El mismo año de “Convoy” también llegaba a los cines de USA el film “High-Ballin’”, en el que éramos testigos de la lucha de dos camioneros contra unos matones que los quieren sacar del negocio. La táctica fue fácil. Fue coger esta película y retitularla “Convoy II” y esperar que el público picase. Si se logró o no, como ya he dicho otras veces, es una cosa que desconozco y que tampoco me quita el sueño.

Y con estos simpáticos camioneros finiquito la octava entrega de “Secuelas Bastardas”. Ahora vienen las preguntas que siempre os hago a modo de despedida: ¿Conocíais la existencia de estos films? ¿Habéis visto alguno de ellos? ¿Conocéis alguna secuela bastarda más? Contad, contad…