Lecturas bizarras: “Chris vuelve a la granja: Nacida inocente 12ª parte”

Todo lo bueno en la vida tiene un final y el de la saga “Nacida inocente” llega hoy. Ha sido un viaje largo, pero muy divertido, este que decidí emprender hace casi seis años en los que he seguido las aventuras y desventuras de Chris Parker a lo largo de doce libros. Quiero aclarar, por si alguien lo duda, que no he necesitado seis años para leer doce pírricos libros. No, lo que sucede es que encontrar alguno de estos libros me ha llevado mi tiempo, y eso ha retrasado a veces la aparición de reseñas de la saga. Unas reseñas que han tenido un éxito increíble. Quién me iba a decir a mí que lo que nació como una chorrada motivada por mi pasión por Linda Blair acabaría convirtiéndose en una de las secciones más populares del blog. Es cierto, no exagero. “Lecturas bizarras” ha sido seguida por decenas de miles de lectores. Repito: decenas de miles. El primer alucinado soy yo. Cuando publicamos el artículo dedicado a “Nacida inocente” no dábamos crédito de la gran audiencia que tuvo. Así fue cómo lo que en principio tenía que ser la reseña de un libro acabo siendo la reseña de toda una saga. Y la cosa fue a más porque cuando apareció la reseña de “Chris: Nacida inocente 2ª parte” superó en audiencia a su predecesora. De hecho, hasta hace bien poco el artículo de la segunda entrega era la más leída de toda la saga. Recientemente la primera la superó. Con la tercera entrega el éxito se repitió, aunque de forma inferior. Y así han ido cayendo el resto de libros hasta llegar al duodécimo y último. Es cierto que no toda la audiencia del principio nos ha acompañado durante todo el viaje, pero sí la suficiente para, repito, hacer de esta sección una de las más populares del blog.

El gerente de Retro Memories está muy contento de los beneficios obtenidos gracias al éxito de «Lecturas bizarras».

A todo eso, y aprovechando que hablo de audiencias, quiero agradecer a todos los que habéis seguido entrega a entrega las aventuras de Chris Parker. Os juro que algunos de vosotros habéis demostrado ser grandes fans. He flipado mucho al recibir mails de gente que me animaba a seguir hasta el final con las reseñas. Cada vez que bromeaba con lo duro que se me estaba haciendo la lectura de los últimos libros recibía algún mail alentándome a continuar y pidiendo que no les dejara sin saber el final. Repito: he flipado mucho con esto. De verdad, gracias. Todos y cada uno de los lectores se merecería un reconocimiento personalizado, pero por falta de espacio voy a limitarme a nombrar a dos de los fans de Chris Parker. Por un lado, tenemos a Rikar, un fiel seguidor del blog que se ha convertido en un amigo más. El bueno de Rikar me envío un mensaje hace unos días maldiciéndome porque está tan enganchado a la sección “Lecturas bizarras” que se ha comprado los seis primeros libros de “Nacida inocente”. Y más que leerlos los está devorando. Y, por otro lado, tenemos a Melina, que además de ser fanática de Chris Parker es la primera fan de Retro Memories en Argentina. Sí, sí, porque la repercusión de “Lecturas bizarras” ha llegado al otro lado del océano. Cómo decía, Melina es la primera fan argentina de Retro Memories. Pero no la última. A estas alturas seguro que ya tenemos millones de seguidores allí. De hecho, en Buenos Aires yo no puedo salir a la calle. “El pibe de la nostalgia” me llaman. No, en serio, muchas gracias Melina por leernos y sobre todo por ponerte en contacto con este humilde redactor para hacerme llegar tus impresiones de mis reseñas.

Vale, llegó la hora de entrar en materia. Vamos a descubrir el desenlace de “Nacida inocente”. ¿Estáis preparados? Pues bien. ¡Allá vamos!

Lector histérico porque llevamos más de 600 palabras y todavía no hemos hablado del final del libro.

Ya de entrada os aviso que el final es de lo más decepcionante, anticlimático y desaborido. Ya advertí en la anterior reseña que me temía que esto iba a suceder. Y así ha sido. Pero vayamos por partes.

Dejábamos a Chris de vuelta al reformatorio. Allí es como una líder para el resto. Es por eso que le encasquetan como compañera de habitación a Mary Ann, una chica que ha asesinado a su madre. Esto empieza bien. Mary Ann es un claro ejemplo de inestabilidad emocional. O eso me parece a mí, que mis conocimientos de psicología se podrían contar con los dedos de una oreja. Mary Ann además de inestable es más tonta que un zapato. Esto la lleva meterse en problemas con las matonas del reformatorio. Justo en ese momento a Chris le llega la oportunidad de repetir la experiencia en la granja. Ya sabéis, un grupo de chicos problemáticos se hace cargo de una granja en un intento de reformarles y hacerles validos para la sociedad. Chris acepta con la condición de que Mary Ann vaya con ella. Y es que le ha cogido cariño, fíjate tú.

En la granja coincidirá de nuevo con algunos de sus compañeros de su primera experiencia “granjeril”. También está en el grupo George, un listillo y tocapelotas que disputará el liderazgo a Chris. Todo es demasiado idílico, así que vamos a poner un poco de drama a la cosa. Además de la granja de Chris y los suyos, hay otra granja con otros chicos surgidos de reformatorios. Como no hay pasta para mantener las dos granjas, un juez decide que haya una competición en la que ambas granjas han de vender los productos que sean capaces de conseguir de sus tierras y sus animales. La que más venda se queda. La otra… Ya os lo podéis imaginar.

Así es cómo empieza una vibrante y feroz competición. Bueno, no. Es un coñazo de tomo y lomo. Es un pequeño suplicio, para que engañarnos. A todo eso, no lo he dicho, pero el líder de la otra granja es Mike. Quedaos con este nombre.

Bien, un par de cosas animan un poco el cotarro. Por un lado, aparece Paul, que es el hijo del dueño del colmado que compra el material a las dos granjas que están en concurso. Paul es guapo a rabiar. Desprende sex appeal a borbotones. Es de esos que te preña con solo mirarte. Y encima cuando muera su padre heredara el colmado. Es normal que Chris se sienta atraída por un espécimen así. Total, Chris se siente atraída por todo aquel que la mira de forma lasciva, este no va a ser menos. La otra cosa es que en la granja encuentran una vieja moto, que el pesado de las pelotas de George querrá reparar con la esperanza de competir en alguna carrera con ella. Nadie duda llegado a este momento que habrá una carrera de motos en la que los amigos de Chris correrán contra Mike y los suyos, ¿verdad? Es que es lo que va a pasar.

Pero antes de la emocionante carrera, y a modo de gloriosa despedida, habrá lo que todos queremos que haya: ¡Una violación!

Seguidores de la saga «Nacida inocente» celebrando que hay una violación.

Chris y Mary Ann están en el bosque hablando de gilipolleces varias para rellenar páginas. En esto, Mary Ann cuenta cómo sucedió la muerte de su madre, que ya os digo que no fue asesinato. Vamos, es que ni siquiera era su madre. De pronto, y de la nada, salen un grupo de tíos que atan a un árbol a Chris y se ceban con la pobre Mary Ann. Una agresión sexual tan gratuita como denunciable. Son salvadas por Paul, que igual te empotra que te rescata, y son llevadas al hospital. Allí el forense nos jode la fiesta al no poder afirmar con rotundidad que Mary Ann ha sido violada. No encuentra restos de fluidos ni es capaz de discernir si hay daños en las nobles partes de la dulce Mary Ann. ¡Vaya puta mierda de forense! Total, que nos quedamos con la incertidumbre de si ha sido solo agresión sexual o violación. Se te quitan las ganas de todo, joder.

Llegamos al momento de la carrera de motos. Compiten Paul, Mike, un parguela del pueblo que está ahí porque mira, un secundario que no tiene frase ni nada y el pequeño Teddy en representación de la granja de Chris. Antes del inicio, Chris descubre que Mary Ann se beneficia a Paul. Por lo que se ve, están tope enamorados. Chris acaba con el corazón roto y el chichi entristecido. Pero sudemos de Chris y pasemos a las motos. La carrera es tan emocionante como ver a tu abuela hacer la siesta. Cuando ya pensamos que no va a suceder nada destacable va y la cosa acaba en tragedia. La moto de Teddy explota y él acaba despeñándose por un puente. Paul se lanza tras el pobre muchacho para rescatarle. Se ve que lo de rescatar gente es su hobby. Mientras, Mike aprovecha la coyuntura para ganar.

Teddy logra salvarse, pero tiene quemaduras de tercer grado. Nada que unos injertos de piel y un par de ibuprofenos no logren curarte. Llega el sheriff y dice que ha descubierto que fueron Mike y los chicos de la otra granja los que agredieron sexualmente a Mary Ann. Así que, como todos los de la otra granja son detenidos, la granja de Chris resulta ganadora de la competición y seguirán adelante con su reinserción. Ojito con el desenlace que más atropellado no puede ser.

Con la granja salvada llega el momento del amor. Chris se da cuenta que George no solo es un plasta y un agonías. También puede ser el hombre de su vida. Él la llama “cariño” y esto para ella es prueba suficiente de que es él y solo él el amor que siempre ha estado esperando. Y así, en el hospital esperando a que le pongan piel nueva a Teddy y con Chris tonteando con George finaliza el libro. El libro y la saga.

Nuestro lector Juan Peláez no puede creer que de esta forma tan lamentable acabe la saga.

Un final flojo, ¿verdad? Nos quedamos con la duda de si Chris volverá a recuperar la libertad, de si será feliz con George, de si volverá a ver a su hermano y de varias cosas más. Tengo la sensación de que la intención era ir haciendo libros de “Nacida inocente” mientras las ventas acompañaran. En cuanto dejaron de hacerlo cancelaron la colección sin darle un final digno. Al igual que se hacía en los ochenta con las series de televisión. O sea, ir haciendo episodios mientras la serie tuviera audiencia y cuando no, cancelación al canto.

Y esto es todo. Dejamos atrás doce libros en los que nuestra heroína ha sido violada cuatro veces, ha tenido seis grandes amores, ha impedido atentados, secuestros, he desarticulado una banda de ladrones de joyas y otra de traficantes de droga. Y todo esto antes de cumplir los dieciocho. Para que luego vayas tú creyendo que tu vida mola un huevo.

Pues ya está. Se acabó lo que se daba. C’est fini. Chris Parker se va para no volver. Si os apetece, os podéis despedir de ella y de paso decir la vuestra. ¿Os ha gustado el final? ¿Seréis fans eternos de “Nacida inocente”? Contad, contad….