Las 15 peores secuelas de los años 90

¡Vuelvo de nuevo a la carga! Tras mucho tiempo ausente en el que me he dedicado a mirar el techo de mi casa y tratar con el desprecio más absoluto a mi portátil he decidido ponerme de nuevo el traje de la nostalgia y teclear cuatro palabras para haceros recordar algo desagradable de vuestro pasado. Si hace un tiempo, muchísimo tiempo, os hablé de cuales eran a mi parecer las diez peores secuelas cinematográficas de los años 80 (¿Cómo? ¡Qué no lo leísteis! Bufff… Podéis hacerlo aquí y aquí) hoy voy a hacer lo mismo pero con las de los años 90. Veréis, en su momento y tras realizar el Top 10 de secuelas apestosas ochenteras me di cuenta que me había dejado mucho bodrio sin citar, así y que para que no me pase lo mismo, he decidido aumentar la lista correspondiente a los años 90 a 15 películas. Que por qué 15 cuando lo habitual sería 10 o 20. Pues porque yo me salgo de lo habitual y porque aunque ya os he dicho que 10 me parecen pocas, hacer 20 me parece un trabajo demasiado duro para la vagancia que llevo encima. Así que 15 y al que esto le suponga un problema mejor que deje de leer ya mismo.

Dicho todo esto vayamos a conocer de una vez a nuestras 15 secuelas noventeras de espanto.

15) “Blues brothers 2000” (1998)

¿Alguien creía que una secuela 18 años después de “Granujas a todo ritmo” iba a interesar al público? ¿Sin John Belushi? ¿En serio? Pues por lo visto, sí.

En 1998 la carrera de John Landis no pasaba por su mejor momento y aunque a Dan Aykroyd no le faltaba el trabajo sus años en los que lograba taquillazos quedaban lejanos. Y no, no me olvido de “Mi chica”, pero ahí el mérito del éxito no residía en Aykroyd precisamente. Así que en un intento de reverdecer viejos laureles Landis y Aykroyd decidieron recuperar a Elwood Blues y darle una nueva película sin su hermano. ¿El resultado? Flojo, muy flojo.

El gran problema de “Blues brothers 2000” es que sus chistes no hacen la menor gracia, los momentos musicales palidecen en comparación a los de su predecesora y lo peor de todo, John Goodman será un gran actor pero la sombra de John Belushi es muy alargada y llenar su hueco se me antoja imposible.

Total, que todo apuntaba a fracaso y eso fue lo que consiguió la película. Y merecidamente.

14) “Este muerto está muy vivo 2” (1993)

Me sabe mal incluir “Este muerto está muy vivo 2” en esta lista porque es un film por el que siento cierto aprecio. Y no por su calidad precisamente, aunque tiene algún gag salvable, sino por la simpatía que siempre me ha despertado Andrew McCarthy.

Pero desengañémonos, “Este muerto está muy vivo 2” es un film prescindible, además de una de las secuelas más innecesarias de la historia. ¿De verdad alguien creyó que la historia del difunto Bernie daba para más? La primera parte dentro de su locura aún era creíble, no mucho pero bueno, pero es que en esta ya entra en juego el vudú y lo convierte todo en una soberana estupidez. M over a un muerto para que parezca vivo es una cosa, pero que se mueva por arte de magia es ridículo.

Bernie, por favor, descansa en paz de una vez.

13) “The hidden 2: El regreso” (1993)

En la década de los 90 hubo una moda que consistió en realizar secuelas directas a vídeo de películas de los 80 de las que la mayoría de la gente ya se había olvidado. De entre ellas, “Hidden (Lo oculto)” fue la que contó probablemente con la secuela más estúpida.

Y es que en “The hidden 2: El regreso” básicamente nos narran la misma historia que en la primera entrega, pero con menos presupuesto y lo que es peor, menos talento tanto detrás como delante de la cámara.

Aquí la hija del policía terrestre de la primera parte, que recordemos moría pero resucitaba gracias al ente alienígena de su compañero, forma pareja con otro policía extraterrestre. O sea, le pasa lo mismo que le pasa o su padre. ¡Toma casualidad! Pero aquí en una explosión de creatividad hacen lo impensable. Si en la primera parte el policía terrestre y el extraterrestre se hacían amigos aquí se enamoran y se acuestan. Y esto os juro que es lo mejor que ofrece esta secuela.

12) “La revancha de los novatos III: La nueva generación” (1992)

¿Puede haber algo peor que una secuela directa a video? Pues sí, una secuela directa a televisión. Y esto es precisamente lo que es “La revancha de los novatos III: La nueva generación”.

Aquí tenemos un intento de revitalizar la franquicia creando nuevos personajes a los que los protagonistas de las dos anteriores entregas les entregaban el testigo. ¿Con que fin? Pues no lo sé, la verdad. Desconozco si el interés era crear una serie de telefilms o de televisión con la nueva generación de protagonista. Fuera como fuera, la cosa no cuajó. O mejor dicho, la nueva generación no caló en el público. Los viejos novatos sí que consiguieron el beneplácito de la audiencia, tanto como para protagonizar una cuarta entrega que, aunque inferior a las dos primeras entregas, es mucho mejor que esta y que aquí solo se vio en televisión, mientras que la tercera parte gozó de una edición en video que tenía una caratula fea de cojones. Supongo que a modo de aviso para espantar a la gente de semejante basura de película.

En fin, que la peor novatada que os pueden hacer en esta vida es obligaros a ver “La revancha de los novatos III: La nueva generación”.

11) “Batman y Robin” (1997)

Voy a deciros una cosa para quedarme tranquilo: “Batman y Robin” me parece una mierda de la peor calaña. Personalmente la odio a muerte por varias razones, como por ejemplo cargarse la franquicia a la que ya “Batman forever” había dejado en coma, pero sobre todo por la caricatura de personaje que es Bane en esta película. Bane es poco más que un tontolaba que solo hace lo que le dice Poison Ivy. ¡Bane! ¡El tío que le rompió la espalda a Batman en los cómics aquí es solo el matón de una “localcoño”! ¡Por el amor de Dios!

Añadidle a esto los cutre trajes más chuscos jamás llevados por el Señor de la Noche y el Chico Maravilla o a Alicia Silverstone como una improbable y fondona Batgirl entre otras muchas cosas y obtendremos un bodriazo por el que sus responsables siguen disculpándose 20 años después.

10) “La ira: Carrie 2” (1999)

Flipad un rato: Resulta que Carrie tenía una hermana ya que su padre dejó embarazada a otra mujer que, casualidades de la vida, también era una fanática religiosa como su madre.

Esto que puede parecer el típico cotilleo que oyes en el mercado de tu pueblo es el pobre argumento sobre el que gira esta tardía secuela de “Carrie”. Evidentemente no hay que ser Sherlock Holmes para deducir que la hermana de Carrie también tendrá poderes.

Y bueno, básicamente “La ira: Carrie 2” narra lo mismo que su predecesora pero de forma más noventera y cutre. Como nexo de unión entre los dos films tenemos a una desesperadísima Amy Irving repitiendo su papel de Sue Snell y que solo pone cara de desear cobrar el cheque y largarse corriendo de la película sin mirar atrás.

9) “La profecía IV: El renacer” (1991)

Si en la secuela de “Carrie” teníamos a una hermana sorpresa aquí lo que tenemos es un… ¿Lo adivináis? ¡Sí! ¡Una hija secreta de Damien Thorn!

Vale, una vez recuperados de esta bomba informativa dejadme deciros que si todavía no habéis visto “La profecía IV: El renacer” es mejor que sigáis viviendo en la ignorancia. Porque estamos ante una secuela televisiva, cosa que ya da mala espina, que se limita a repetir el esquema de “La profecía”. Supongo que la intención era hacer una trilogía televisiva sobre la hija de Damien pero el sonoro fracaso de esta entrega tanto a nivel de audiencia como de crítica echo la idea por el suelo.

¡Ojo! A pesar de ser un telefilm en España se estrenó en cines. Y es que los distribuidores de nuestro país son peores que el propio Anticristo.

8) “Mira quién habla ahora” (1993)

¡Ahá! Veamos. En la primera parte el que hablaba, aunque no lo oyera nadie, era el bebé llamado Mickey. En la segunda parte eran Mickey y su hermana. Así que en la tercera entrega, y en un alarde de riesgo argumental, en lugar de seguir aumentando la familia con bebes parlanchines los guionistas decidieron que los que hablarían serían… ¡Los perros!

Y tú querido lector estarás pensando ahora mismo: “Menuda mierda de idea”. Pues lo que a simple vista parece que lo es resulta que… Sí, que lo es. Esta secuela costó 22 millones de dólares y no recuperó ni la mitad lo que os da una idea aproximada del nivel de patetismo que destilaba esta película y que alejó a la gente de los cines.

Así que Mickey, tú y los tuyos callaos de una puta vez.

7) “El nuevo Karate Kid” (1994)

En los años 90, y gracias al boom que experimentaba el cine de artes marciales gracias a Van Damme y coetanos, alguien decidió que sería buena idea seguir estirando la franquicia “Karate Kid” con nuevas entregas. El problema es que Ralph Macchio estaba por aquel entonces mayor y gordo para seguir interpretando al protagonista, así que los productores decidieron hacerle un lavado de cara a la saga cambiando al protagonista. Y puestos a hacer cambios no hay cambio más radical que cambiar el sexo de la estrella de la función.

Pues sí, en “El nuevo Karate Kid” una chica es la encargada de recibir la formación del señor Miyagi, que sí que aparece porque sin él nadie tendría interés en ver esta secuela. Aquí tenemos un problemilla porque si una fémina es la protagonista la película debería titularse “La nueva Karate Kid”, ¿no? Bueno mejor llamo a Irene Montero y se lo pregunto porque ella sabe mucho de estas cosas. De hecho se ha erigido como portavoza de causas nobles como esta.

Al lío, que lo que os quería decir es que “El nuevo Karate Kid” es mala con avaricia. Solo se salva que Hilary Swank es la protagonista de la función, cuando aún ni soñaba en ganar un Oscar y mucho menos dos.

6) “Regreso al lago azul” (1991)

Ojo, que con esta ya nos toman por idiotas redomados. Si recordáis en “El lago azul” la pareja protagonista, que recordemos eran unos chavales supervivientes de un naufragio que sobreviven en una isla desierta en la que descubren el amor, el sexo y los embarazos no deseados, y su hijo son rescatados por un barco mientras iban a la deriva en una barca. Pues bien, resulta que ellos estaban muertos así que solo rescatan a su bebé. Pero en el colmo de la mala suerte resulta que se desata una epidemia en el barco y la palman todos excepto una mujer, su hija pequeña y el bebé de los protagonistas de la primera entrega. Los tres van a dar con sus huesos a la misma isla de la primera parte. Allí la única adulta muere y los dos chavalillos crecen solos en la isla en la que descubren el amor, el sexo y los embarazos no deseados. Y con este argumento querían lograr un taquillazo. Fíjate tú.

La gracia de la película estaba en que la protagonista era Milla Jovovich que acababa de dejar la pasarela para probar suerte en el cine. Pues vale.

5) “Las aventuras de Bastian: La historia interminable III” (1994)

Pocas películas han tenido secuelas más mierdosas que “La historia interminable”. Normalmente cada saga tiene una pésima secuela, algunas incluso tienen la mala suerte que esta pésima secuela es la segunda parte y con ella llega el finiquito de la franquicia. Pero probablemente “La historia interminable” tenga el record de que todas sus secuelas, las dos, sean horribles. De hecho cualquiera de las dos merecía estar en este top, pero he decidido indultar a la segunda parte por respeto a la memoria de Jonathan Brandis, su protagonista.

Los errores de “Las aventuras de Bastian: la historia interminable III” son varios. Uno es no respetar en nada la novela en la que supuestamente se basa. Otros son no tener en cuenta lo narrado en las dos anteriores películas y hacer que casi toda la acción se desarrolle en el mundo de los humanos en lugar de Fantasía. Añadid a esto la supresión de personajes como Atrayu y entenderéis el porqué de su descalabro.

Afortunadamente para todos tras esta entrega Bastian dejó de leer para siempre.

4) “Cariño, nos hemos encogido a nosotros mismos” (1997)

Cuando una película no llega ni a los 75 minutos de duración uno ya se puede hacer una idea de que muchas ganas no es que le hayan puesto al asunto, ¿verdad? Pues esto es exactamente lo que ocurre con “Cariño, nos hemos encogido a nosotros mismos”, tercera entrega de la saga iniciada con “Cariño, he encogido a los niños”.

Estamos ante un directo a vídeo en la que solo repite Rick Moranis del casting original. Seamos sinceros, de hecho él es el único del casting original que podía despertar interés en el público para ver esta bazofia que Disney solo produjo con la intención de conseguir cuatro duros de manera rápida y sencilla.

La historia es la misma que en la primera parte cambiando a los niños encogidos por adultos. Todo esto explicado encima con limitaciones presupuestarias, lo que hace que los F/X sean tan cutres que te harán llorar.

Tras esta ponzoñosa película, Disney siguió explotando la franquicia con una serie de televisión deleznable en la que ya no aparecía ni Rick Moranis.

3) “Las primeras nueve semanas y media” (1998)

De verdad que hay cosas que existen porque en este mundo tiene que haber de todo sino uno no se explica cómo algún productor decidió meter dinero para realizar una tercera entrega de “Nueve semanas y media” que no interesaba a nadie. Y a las pruebas me remito pues un año antes había llegado “Nueve semanas y media en Paris”, en la que repetía un Mickey Rourke desesperado por conseguir efectivo con el que pagar sus operaciones estéticas. La película fue un sonoro fracaso así que la idea de realizar una tercera entrega, que además funcionaba como precuela, sin contar ya con nadie del casting original era de una estupidez supina.

“Las primeras nueve semanas y media” es el típico producto “softcore” en la que vemos una y otra vez como uno de esos actores que pasa más tiempo en el gimnasio que recibiendo clases de interpretación finge con cara de pasmo gozar teniendo sexo con una actriz cuyo mayor talento fue conseguir dinero para ponerse silicona en los pechos.

No da ni para paja, pero si lo queréis comprobar por vosotros mismos es fácil encontrar una copia en DVD de esta bazofia en tiendas de saldo por menos de 2€.

2) “Los inmortales II: El desafío” (1991)

Y llegamos al momento que todos estabais esperando. El momento en el que toca hablar no solo de la que es considerada como la peor secuela jamás rodada sino que además también es considerada una de las peores películas de la historia.

Llegados a este punto voy a decir una cosa amparándome en el hecho de que por mucho que os cabreéis al leerla no podréis venir a mi casa a romperme la cara porque nadie sabe donde vivo. ¿Preparados? A mí “Los inmortales II: El desafío” no me parece tan mala.

A ver, como secuela es un puto desastre, eso no lo negaré. Se carga la mitología y la magia de la primera parte en un plis. Pero a pesar de eso creo que hay secuelas peores. De hecho cualquiera de las películas citadas en este artículo con anterioridad me parece peor. En serio. Esta película está condenada de antemano por continuar una cosa que no tenía continuación. “Los inmortales” tenía un final tan cerrado que no permitía que la historia diera para más. Hacer una segunda entrega era un suicidio, como se demostró. Pero sigo afirmando que hay secuelas mucho peores. Sin ir más lejos esta misma saga nos da un buen ejemplo de ello en su quinta entrega titulada “Los inmortales: El origen”, cuyo fracaso supuso el fin del clan MacLeod.

Dicho esto solo añadiré que decir que “Los inmortales II: El desafío” es una de las peores películas de la historia me parece absurdo. Hay cientos de cosas mucho peores. No nos flipemos.

1) “Los pájaros 2: El fin del mundo” (1994)

Hacer una secuela de una obra maestra es una pésima idea. Hacer una secuela 31 años después de la película original es una idea horrible. Hacer una secuela televisiva de un clásico del cine es una idea estúpida. Pues bien, hacer una secuela televisiva de una obra maestra del cine 31 años después debería estar penado con cadena perpetua. Esto es lo que se merecen los responsables de “Los pájaros II: El fin del mundo” por haber hecho todo lo anteriormente citado.

Por si todo lo dicho no fuera poco esta secuela aún tiene un pecado peor. Contrataron a Tippi Hedren, protagonista de la primera entrega, y cuando crees que lo hicieron para utilizarla de nexo entre las dos películas descubres para tu sorpresa que interpreta un personaje distinto. Para mear y no echar gota.

“Las pájaros 2: El fin del mundo” es tan horrible que Rick Rosenthal, su director, descontento con el resultado final firmó la película como Alan Smithee. Con esto creo que está dicho todo.

Y con la secuela de “Los pájaros” damos por terminado este larguísimo Top 15. Ahora llega el momento que os manifestéis vosotros. ¿Qué os parece el Top? ¿Echáis de menos alguna película? Contad, contad…