La foto de la semana: Los chinitos de la suerte

Al poco tiempo de pasar la moda de los «Hilos Scoubidou» que os relatamos esta misma semana y que podéis leer haciendo clic  aquí, un nuevo engendro digno de la mente más perturbada pobló las muñecas de varias generaciones de jóvenes inocentes que sólo tenían en mente el intentar labrarse un futuro lo más prometedor posible. Y como la cultura del esfuerzo, el estudiar hasta reventar y todo lo que tenga relación con el trabajo duro poca presencia tiene dentro de las culturas latino-mediterraneas, dejamos el devenir de nuestras vidas a la casuística y la suerte que podían generar unos trozos de madera mal tallados, peor pintados y de dudoso gusto estético en general: los chinitos de la suerte.

La premisa era muy sencilla, cuantos más tuvieses en tu muñeca más suerte en la vida tendrías. Y las consecuencias de la misma fueron totalmente nefastas. Piques en la hora del recreo sobre quien tenía más, chantajes emocionales a los padres para que cada semana te comprasen un chinito nuevo… «¡No el rojo con el hilo verde no! ¡Que ya lo tengo mamá, que no te enteras!». Antebrazos totalmente plagados de chinitos que generaban infecciones en la piel debido a la impermeabilidad de tanto hilo junto que hacía que el agua y el jabón difícilmente llegasen a tocar carne… por suerte en la mayoría de casos fueron infecciones leves que no desencadenaron en cangrena y, por tanto, los afectados conservaron sus miembros, pero cuenta la leyenda que… (imaginadlo vosotros mismos viejunos)

¿Nunca os habías planteado por qué los nacidos en los 70 tenían los brazos más largo que la medía de la humanidad? El peso de ingentes cantidades de chinitos de la suerte nos deformaron los brazos a todos. ¿Y total para qué? ¿Realmente tuvimos más suerte? No. La madera es madera y te dará suerte  si necesitas hacer un mueble o encender un fuego, pero el dinero y la fortuna te lo dan otras cosas (bueno, los tochos no implican esfuerzo y si que hicieron millonarios a unos cuantos…. pero eso ya me lo guardo para otro día y otro tipo de blog)

Y la sorpresa final… si creéis que los chinitos de la suerte aun os pueden dar fortuna y solucionar todos vuestros problemas, tenéis que saber que se siguen comercializando y que los podéis personalizar a vuestro gusto. Aquí tenéis la información.

Tomad la medicación viejunos…