¿Qué es el éxito viejun@s? ¿Qué nos puede hacer saber que hemos triunfado? ¿Ser populares? ¿Ser reconocidos por la calle? ¿Tener varias cuentas bancarias llenas a rebosar en paraísos fiscales? ¿Todas estas cosas juntas? ¿Con una hay bastante? En realidad no tengos respuestas absolutas para todas estas preguntas, pero lo que sí puedo aseguraros es que todas las canciones de las que os voy a hablar triunfaron, tuvieron éxito y por tanto fueron hits. Y lo fueron tanto que en la mayoría de casos llegaron a dejar de lado, o quizá sería más correcto decir «eclipsar», una realidad común a todas ellas: fueron versiones de canciones anteriormente compuestas, grabadas y publicadas por otro(s) artista.
¿Es esto algo ilícito o amoral? Para nada. Partiremos de una base en la que supondremos que todos los artistas que mencionaremos pagaron sus respectivos royalties, daremos por sentado que las versiones fueron creadas dentro de la legalidad, no fueron plagios. Es por eso que seguramente los compositores originales se lucraron también con ellas. Por tanto, y volviendo al principio, si entendemos el hecho de tener éxito con el hecho de atesorar mucho dinero, los compositores originales (o sus herederos) gracias a las versiones que se convirtieron en hits, triunfaron. Pero si relacionamos el éxito con el hecho de la realización del ego, del ser conocido y/o de que tu trabajo y esfuerzo sean reconocidos públicamente, los creadores de estas canciones, en el fondo fracasaron (ojo, siempre relacionándolos con estas canciones en concreto, quizá su carrera sí que fue exitosa por otros hits o trabajos).
Sea como sea espero que esta lista os llegue a sorprender, aunque sea simplemente por el placer de recordar viejos hits, pero si os sorprende por su contenido más profundo, es decir, porque descrubrís que alguno de los hits jamás hubieseis pensado que no era original del artista que lo hizo popular, la misión estará cumplida. ¡Al turrón!
Milli Vanilli – «Girl You Know It’s True» (1988)
No tenían suficiente los «buenos» de Milli Vanilli siendo uno de los casos más flagrantes de sucios impostores en la historia de la música, sino que además, a parte de no cantar, ni se molestaban en «representar» canciones originales. A mi personalmente jamás me gustaron, de hecho la música que «hacían» me parecía un buen ñordo , así que en el fondo me alegré de que fuesen un timo y de que sus fans se quedasen con su coraconcito roto. De hecho, todo el pastel se descubrió gracias a esta canción ya que la frase del estribillo «girl, you know it’s» se quedó en modo bucle durante un concierto en Bristol (el Bristol yanky de Connecticut, no el del Reino Unido). Fue el detonante que levantó la liebre y que hizo que la gente empezase a sospechar que los componentes de milli Vanilli eran cantantes más falsos que las muertes en «El Equipo A». El caso es que la versión original era de:
Numarx – «Girl You Know It’s True» (1987)
Justo un año antes, el grupo de Baltimore Numarx compuso y grabó la canción que se incluyó en su único trabajo conocido: «Our Time has Come». De hecho Numarx no era bien bien un grupo al uso, sino un conjunto de DJ’s locales que se juntaron para producir, o intentar producir hits discotequeros de éxito. Pero su asociación fue más bien efímera.
Status Quo – «Rockin’ All Over the World» (1977)
Esta es una de las versiones que se hicieron famosas que más me toca las gónadas. Y no es por que tenga ningún tipo de aprensión ni nada personal en contra de los Status Quo, incluso les perdono el tostón de «In the Army Now». Lo que pasa es que creo que la versión original es tan o más buena que la que hicieron ellos y, a parte, la canción está compuesta por uno de mis ídolos del rock de todos los tiempos, que no es otro que:
John Fogerty – «Rockin’ All Over the World» (1975)
Tras la disolución de los Creedence Clearwater Revival, John Fogerty grabó su homónimo primer trabajo en solitario. La canción llegó a estar dentro del top 40 de EEUU durante seis semanas, aquí supongo que no llegó ni de casualidad. Sea como sea me repito, John (dios) Fogerty es uno de mis heroes del rock, un puto genio al que tuve el honor de ver en directo en 2009, cuando ya creía que jamás lo haría. Evidentemente cantó esta canción.
UB40 – Red red wine (1983)
Nunca he soportado a los UB40. ¡Joder, qué rabia me han dado siempre! Esa mezcla de reggae cutre de sintetizador y cara de panoli del cantante siempre ha podido conmigo. A pesar de ello reconozco que, bueno, esta canción la medio salvaría de la quema por dos motivos: primero, era de lo poco un poco diferente que podías llegar a escuchar en muchas discotecas y segundo, habla del vino tinto y, joder, el vino mola. Lo que pasa es que su compositor original no era el cara merluzo ese pelirrojo, si no que era:
Neil Diamond – Red Red Wine (1968)
15 años antes de la verisón de UB40 Neil Diamond incluyó esta canción en su album «Just for You». Si la escucháis veréis que nada tiene que ver con el reggae y que los arreglos son de muy buena calidad. La canción es bastante deprimente en sí, no te animaría el día de buena mañana vamos, ya que habla del vino como la única solución que encuentra un tío que esta afligido y con cara de pena, casualmente igual que el cantante de los UB40.
Soft Cell – «Tainted Love» (1981)
Este es quizá uno de los casos más conocidos de versión de una canción. A pesar de ello y por si queda algún despistado por ahí que no lo conozca, incluyo este temazo aunque sea por el pedazo de vídeo que se curraron. Esta versión de Soft Cell directamente lo petó, estuvo 43 semanas dentro del top 100 americano y se convirtió en uno de los más grandes on hit wonder de los ochenta, tras ella, al poco tiempo del éxito el grupo se separó. A mí una cosa que siempre me ha llamado la atención es que más de una persona con la que he hablado creía que la canción era de Depeche Mode, y nada tenían que ver con ella, de hecho, la primera vez que se grabó la interpretó una mujer:
Gloria Jones – «Tainted Love» (1964)
La canción original, que para mí es un temazo como la copa de un pino, fue la cara B de un single que no llegó a las listas ni en el Reino Unido ni en EEUU. En 1973 el DJ británico Richard Searling de vuelta de un viaje a EEUU se trajo una copia del single consigo. Como la canción tenía ritmo y se adecuaba a los estándares de los clubs de aquella época (recordad, casi 10 años después de ser grabada) se hizo enseguida popular. En 1976 la misma Jones, al enterarse de su éxito «underground» volvió a regrabar la canción con un aire un poco más discotequero, pero de nuevo se quedó a las puertas y no llegó a entrar en ninguna lista de éxitos.
Glenn Medeiros – «Nothing’s Gonna Change My Love for You» (1987)
En serio, ahora en serio, de verdad… Lo de Glenn Medeiros fue una puta broma, ¿no? Por si fuese poco la poca decencia de grabar un video tan cutre, hortera y baboso como el que tenéis justo encima, el tío cantaba como el puto culo y era feo de pelotas. Sí sí, feo con avaricia. Yo también lo soy, y no pasa nada, lo eres y punto, es algo que aceptas y que aprendes a vivir con ello. Pero lo fuerte es que todas las tías iban locas por él.. Pero… ¿qué cojones? ¿Cómo podía ser? Si ver su cara estampada en una carpeta provocaba arcadas. Quizá el tío descubrió la burundanga e impregnaba sus discos con ella, yo que sé, pero lo de este tipo no era normal. ¿Que soy un exagerado? ¿A sí? Vale, juzgad vosotr@s mism@s… ¿es este tío guapo?
Vamos, no me jodas. A parte de feo el tío tenía unos cojones como dos pelotas de baloncesto. Aquí os dejo uno de los momentos más épicos de la historia de la televisión (a partir del minto 5:21). Primero lo entrevistan y el pavo no deja de soltar topicazos a cascoporro, pero eso no es lo mejor (o peor). El tío se pone a hacer ver que graba la canción en castellano y el cabrón falla más el playback que una escopeta de feria trucada. Imaginaos lo flagrante del tema que, justo al terminar el vídeo, Beatriz Pecker suelta una frase medio descojonándose que no os podéis perder, en serio, miradlo. Estoy convencido de que me lo agradeceréis igual que yo agradezco a mi socio Álex haberme hecho recordar este momentazo televisivo:
Y paso ya de ver más el jeto de este tío y pasemos a ver quién fue el compositor de este gran hit, que no fue otro que el genial guitarrista, cantante y compositor:
George Benson – «Nothing’s Gonna Change My Love for You» (1984)
Sí señoras y señoras, el señor que compuso el gran temazo «Give Me the Night», genial, ¿verdad? Un buen músico, gran instrumentista y supongo que mejor persona pero que no tuvo reparos ni vergüenza de grabar el videoclip que acabáis de ver (¿Cómo? ¿Que no lo has hecho? ¡Dale al play insensato ahora mismo y para de leer que voy a soltar spoiler!) donde con sus dos santos cojones negros le da por hacer una ¿parodia? de Casablanca. Joder, joder, joder, es que todavía estoy en shock. ¿Pero qué puta lógica tiene? ¡Le esta cantando a una pava al lado de un bimotor con los dos putos motores encendidos! ¡Sacadlos de ahí que se van a quedar sordos, hostia ya! El videoclip parece sacado de un descarte de «Top Secret» más que ser algo serio. Muy destacable por eso la interpretación de la mujer y el policía. De Oscar vamos.
Permitidme hacer un apunte a todo esto. Si George Benson (que por si no lo habíais notado es negro) interpreta el papel de Rick Blaine cuando en la película original éste era blanco (¿recordáis? Humphrey Bogart, un tipo caucásico con menos expresión facial que Espinete),en tal caso la película, en vez de llamarse Casablanca se tendría que haber llamado… tachann….. ¡Casanegra! (subid el volumen y dadle aquí por favor).
Y esto ha sido todo por hoy. A la espera de las denuncias de alguna asociación por este último chistaco me despido de vosotros hasta el próximo post que no sé si tendré que escribir desde el trullo. Me quedan en la recámara muchas más canciones que lo petaron y que eran versiones, algunas que seguro que os sorprenderán, y mucho. Si os ha gustado este post y os gustaría que hiciese, como mínimo, una segunda parte, hacédmelo saber en los comentarios.
Tomad la medicación…