“El club de los cinco”: 35 años de homenajes, guiños y culto merecido

A estas alturas de la vida supongo que nadie va a discutir lo icónica y mítica que es “El club de los cinco”. Cuando uno se pone a realizar una lista de las películas ochenteras que más huella han dejado, pocos, por no decir ninguno, son los que dejan fuera a este título. Supongo que tampoco hace falta decir que el malogrado John Hughes nos legó una película que sobrevive y sobrevivirá a la perfección al paso del tiempo, pues el tema que trata afectó, afecta y afectará a generaciones pasadas, presentes y futuras y la manera de contarlo sigue emocionando hoy igual que hizo en 1985 y cómo hará en un futuro lejano.

Mañana, “El club de los cinco” celebrará una efeméride importante. Mañana se cumplirán treinta y cinco años de su estreno en Estado Unidos. Si bien la cinta tuvo una premier en Los Ángeles el siete de febrero de 1985, no fue hasta el día quince que el gran público empezó a tener acceso a ella. Hoy quiero celebrar este aniversario con todos vosotros. Y no lo quiero hacer hablando de todos los pormenores de la película, su rodaje o de la vida de sus actores. Lo quiero hacer hablando de su legado, para demostraros que lo que os decía al comienzo de este artículo no es una exageración. Os mostraré como “El club de los cinco” sigue marcando a una generación tras otra a través de los homenajes que ha ido recibiendo en diferentes medios y a través de los años. Un viaje nostálgico que os aseguro que vale mucho la pena.

Si hay una imagen que le viene a la cabeza a todo el mundo al hablar de “El club de los cinco” esa es, sin duda alguna, la de su póster. Todo el mundo conoce a la perfección la distribución y la postura de cada uno de los actores protagonistas en él. Es una imagen tan conocida y tan famosa que muchos han sido los que le han rendido homenaje a la película de John Hughes imitando ese cartel.

Los primeros en hacerlo fueron los protagonistas de la secuela de “La matanza de Texas”, conocida por estos lares como “Masacre en Texas 2”. Si bien aquí nos encontramos que nuestra familia de caníbales favoritos esta más bien realizando una parodia que un homenaje, ya empieza a quedar claro la popularidad que tenía ya el póster de “El club de los cinco”.

Hagamos un salto del mundo del celuloide al mundo de las viñetas para continuar. Los cómics de Archie son, seguramente, lo más parecido a una película de adolescentes ochentera como las que firmaba John Hughes. Es por eso lógico que ellos también se sumen al homenaje. De hecho, han rendido pleitesía a la película varias veces. Como por ejemplo en la cubierta alternativa del número 600 de “Archie”.

Pero también en la portada alternativa del número 1 del spin-off que protagoniza Kevin Keller.

El último homenaje venido del universo de Archie llegó a través de la serie “Riverdale”. Para promocionar un episodio ambientado en los años ochenta, y cuya base argumental también era un guiño al film de John Hughes, utilizaron esta imagen.

Marvel imitó a Archie Comics y también brindó homenajes a la película a través de las portadas de algunos de sus publicaciones. Como “Los Vengadores”…

“Los Campeones”…

O “Solitarios”.

Varias han sido las editoriales y colecciones que han seguido el ejemplo de Archie Comics y Marvel. Por citar algunas, diremos a Dark Horse y su crossover que juntó a Angel y Faith…

IDW y su colección dedicada a los Power Rangers.

Y más recientemente Scout Comics con el número uno de “The Mall”.

Hablando de cómics: un par de personajes surgidos en las viñetas de DC y Marvel también han mostrado sus respetos a “El club de los cinco”, pero no lo han hecho a través de las páginas impresas sino mediante su adaptación a la gran pantalla. De esta guisa decidieron hacerse una foto los protagonistas de “Wonder Woman 84”:

Spider-Man no quería ser menos que la Mujer Maravilla y presentó esta imagen promocional para presentar en sociedad su, por entonces, última película.

Mismo truco, diferente película. “Ready player one” ya había utilizado la misma táctica que “Spider-Man: Homecoming”, como podéis ver a continuación:

Y antes que ellos, el documental “American Teen” lució este póster:

Como podéis ver, el póster de “El club de los cinco” lleva más de tres décadas siendo homenajeado, parodiado o copiado. Pero no es la única cosa de la película que ha trascendido a lo largo de los años. La imagen y apariencia de sus protagonistas, su trama y su banda sonora también calaron y siguen calando con fuerza. Y de esto podemos encontrar un buen ejemplo gracias a las series de televisión.

En el séptimo episodio de la primera temporada de “Dawson crece” titulado “Detention” le hacen un guiño a “El club de los cinco”, pues los protagonistas de la serie, al igual que les pasó a los de la película, tienen que permanecer un sábado en una aula de castigo.

Los protagonistas más jóvenes de “Los Goldberg” también tienen que pasar un sábado castigados en el instituto, aunque aquí además del guiño al argumento a la película de John Hugues también imitan la imagen de sus protagonistas.

En “Padre de familia” son muy aficionados a realizar parodias de clásicos ochenteros. Evidentemente, “El club de los cinco” no se iba a librar de ello.

Y claro, si lo hace “Padre de familia”, “Los Simpson” no se iban a quedar de brazos cruzados:

Ahora bien, el mejor homenaje que Matt Groening realizó a la obra de John Hughes no fue a través de la familia más famosa de Springfield sino gracias a “Futurama”. En uno de los mejores episodios de la serie, Fry nos explica la historia del trébol de siete hojas que le daba mucha suerte y que escondía en la funda del vinilo de la banda sonora de “El club de los cinco”.

Y para terminar voy a citar un gag de “Cómo conocí a vuestra madre” en el que recuerdan cómo en un Halloween todos se disfrazaron por error como el personaje interpretado por Judd Nelson en la película.

Toca ir acabando y para hacerlo nada mejor que hacerlo echando unas risas. En 2001, llegó a las pantallas de cine «No es otra estúpida película americana», una spoff movie que parodiaba varias de las más famosas comedias adolescentes y, evidentemente, «El club de los cinco» no podía faltar. Aquí, además, la gracia radicaba en ver a Paul Gleason repetir el mismo papel que ya realizaba en la película de John Hughes.

Estos son solo algunos de los muchos homenajes, guiños, parodias, citas y/o menciones que he encontrado de “El club de los cinco”. Citarlos todos sería una tarea titánica e interminable, pues hay cientos y cada día es probable que en algún medio salga a la luz uno nuevo. Fijaos que curiosamente la mayoría de ellos han llegado recientemente. Eso indica la vigencia que tiene la película aún. Vale que venimos de un tiempo que se ha dedicado a ensalzar todo aquello que nació en los años ochenta, pero estaréis de acuerdo conmigo que ningún otro título ha causado el mismo impacto ni ha recibido el mismo cariño y muestras de respeto que “El club de los cinco”. A nivel de impacto en la cultura popular tal vez solo sea superada por la saga de “La guerra de las galaxias”. Sea como sea, su mérito esta fuera de toda duda.

Cómo veis, a lo largo del artículo no he expresado mi opinión sobre la película. Hoy me he limitado solo a mostraros pruebas para demostrar su grandeza. Pero lo siento, no puedo terminar sin dedicarle al menos cuatro palabras. Dicen de “El club de los cinco” que es la mejor película adolescente de todos los tiempos. Lo es. Sin duda alguna. Pero no solo lo es. Lo será siempre. Dudo mucho que nunca salga otra película que le pueda hacer sombra. Y una cosa más. Es una jodida obra maestra. Que nadie os convenza de lo contrario.